Add parallel Print Page Options

27 Es que a un árbol le dicen:
    “Tú eres mi padre”;
y a una piedra le dicen:
    “Tú eres mi madre”.
Me dieron la espalda,
    no me dan la cara;
pero cuando estaban sufriendo me dijeron:
    “Levántate y sálvanos”.
28 Judá, ¿dónde están los dioses que tú hiciste?
    Tienes tantos dioses como ciudades;
pues que ellos vengan y te salven
    cuando estés en desgracia.
29 “¿Por qué te pones a alegar conmigo
    si todos ustedes se rebelaron contra mí?”
    Lo dice el SEÑOR.

Read full chapter